Este sábado organizamos nuestra segunda jornada de voluntariado con la participación de casi treinta personas de dos grandes empresas como UPS, que repetía… e Isban, que venían por primera vez y nos ayudaron a instalar los doce ordenadores que su empresa nos ha donado, entre otras cuantas tareas más.
Teníamos por delante un duro día de trabajo, pero se respiraba en el ambiente una gran ilusión por cumplir con los objetivos que nos habíamos marcado. Incluso hubo alguno que otro, que una vez finalizada la jornada y después de un pequeño aperitivo, no pudieron irse sin terminar el recubrimiento con palo de sauce de la pérgola del jardín interior.